30 enero, 2008

Memoria de elefante

Era absolutamente necesario bajar los cristales, sacar la cabeza, gritarle a la libertad y tragar todo el aire puro. Era imprescindible llevar el CD de Juan Luis Guerra. Acaso llovía café? Era totalmente idóneo escuchar a Rubén Blades junto a Draco Rosa: "Patria, son tantas cosas bellas". No había que concensuar para hacer la parada, suspirar con el paisaje, tomar las fotos y hacer la promesa de volver. Y volvimos. Volvimos a sentir la vida respirarnos en la cara, volvimos a subir la carretera Jamao que es como subir la carretera que da al cielo. Tal vez, si nos parábamos a preguntar, nos dirían "sí, sí, más adelante verán a San Pedro". Allá estaban las lomas como bolas de helados de menta, las ramas de los arboles como brazos de mujer, las nubes jugando a ser algodón, y nosotros, antagonistas de esta tierra . Anduvo Mir por estos parajes? Ya no me cabe duda. Cual sería la excusa? un almuerzo? un café? Que bueno es sumar amigos a las travesías, limpiar nuevamente los pulmones. En fin, cuándo volvemos?
"No memorices lecciones
de dictaduras o encierros
la patria no la define
los que suprimen a un pueblo
la patria es un sentimiento
en la mirada de un viejo
son la entera primavera brisa de hermanita nueva
te contesto, hermanito, Patria son tantas cosas bellas."
Ruben Blades

1 comentario:

  1. Es uno de esos momentos increibles que se viven del impulso de hacer las cosas que quieres cuando quieres. Ver la vida y tomar un cafe con los amigos. Espero que volvamos a hacerlo...
    Elizabeth

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